Nuevo dique de Beijing en el Mekong: ‘devastadoras’ las consecuencias ambientales
de Peter Hung

Frente a una inversión de casi 5 millardos de dólares, China se prepara para construir sobre el trecho camboyano la Sambor Hydropower Dam. Según los expertos, ésta influirá en modo muy negativo sobre el ambiente natural y social de los camboyanos y vietnamitas que viven en el delta del Mekong. El gran río es fuente de sustento para cerca de 60 millones de personas que viven en los asentamientos a lo largo de su curso.         


Ho Chi Minh City (AsiaNews) – Las comunidades vietnamitas que viven a lo largo de las orillas del Mekong expresan temores por el impacto destructivo que un nuevo dique chino-camboyano podrá tener sobre el ecosistema de la región. Una vez completada, la Sambor Hydropower Dam será la más grande construcción jamás realizada sobre el río Mekong.

A lo largo de 4.350 Km, ésta es la más grande reserva de pesca en tierra adentro del mundo y es el segundo después del de Amazonia en cuanto a biodiversidad. El Mekong es fuente de sustento para unos 60 millones de personas que viven en los asentamientos a lo largo de su curso, que desde las tierras altas tibetanas atraviesa Myanmar, Laos, Tailandia, Camboya y Vietnam, antes de desembocar en el Mar Chino meridional.

Sin embargo, más al norte, es China quien controla los flujos de las aguas del Mekong. Beijing ya tiene el control del trecho superior del río con 8 diques y está invirtiendo en más de la mitad de los 11 diques planificados más al sur. Las empresas chinas han invertido en la empresa millardos de dólares, pero hasta ahora no estuvieron en grado de efectuar evaluaciones sobre el impacto ambiental y social.

Con el apoyo de Beijing, que compensa a sus vecinos del sudeste asiático con inversiones y préstamos a condiciones favorables, también a compañías y empresas estatales de Tailandia, Vietnam y Laos que sacan ventaja de los nuevos proyectos hidroeléctricos. Camboya está entre las naciones más activas. Los gobierno de Beijing y Phnom Penh ya han colaborado en la construcción de la Lower Sesan Hydropower Dam que, ya costó 816 millones de dólares estadounidenses, tiene una capacidad productiva de 400 megawatios.

Frente a una inversión de casi 5 millardos de dólares, China se prepara ahora para construir en suelo camboyano la Sambor Hydropower Dam. Según los expertos, ésta influirá en modo negativo sobre el ambiente natural y social de los camboyanos y de los vietnamitas que viven en el delta delMekong. También el dique de Sambor fue proyectada por la China Southern Power Grid Company (CSPGC) y podrá contar con una cuenca record de 620 Km cuadrados.

Un informe publicado por el estadounidense National Heritage Institute (NHI) hace 4 días declara que el establecimiento de Sambor “destruirá las especies animales del río Mekong”. “No obstante el proyecto traerá grandes beneficios energéticos a Camboya-se lee en el documento. Esto está contribuyendo en la destrucción del ambiente de vida de millones de camboyanos”. Los expertos de EEUU han pedido a los dos gobiernos detener el proyecto y Phnom Penh todavía no se expresó al respecto.

La realización del establecimiento tendrá o provocará graves consecuencias también en Vietnam, donde millones de personas serán afectadas por las variaciones de los flujos del Mekong. En los próximos 10 años, las condiciones del río cambiarán en un modo drástico: la falta de una suficiente cantidad de agua dulce en su cuenca, causará una elevación de los niveles de salinidad, provocando siempre más frecuentes episodios de sequía que pondrá de rodillas al sector agrícola.

Hasta ahora, la Mekong River Commission (MRC) realizó muchos estudios científicos y lanzó diversos pedidos para limitar la construcción de diques en el río. Esta acción está dirigida para garantizar el desarrollo sustentable de todos los países a través de los cuales el río pasa. Según los cálculos de la Comisión, los beneficios que derivan de la construcción del dique de Sambor son muy inferiores a las pérdidas que esta está generando. Los expertos subrayan los inminentes daños a la pesca, a la agricultura y el riesgo de extinción de muchas especies de animales y vegetales.