Activistas israelíes: la ‘vergüenza’ de Israel en Gaza

Se eleva a 17 el número de muertos por la manifestación del 31 de marzo. Israel rechaza las acusaciones y deniega el pedido de una investigación independiente. Duras críticas de las ONG: el gobierno israelí acusa a Hamas y a los palestinos de ser violentos para ocultar su responsabilidad en la crisis humanitaria.


Jerusalén (AsiaNews) – “El gobierno israelí quiere hacernos creer que toda la situación que rige en Gaza es por culpa de los palestinos”. Es la acusación Hagit Ofran, de la ONG israelí Peace Now, una de las voces que en los últimos días se ha descargado contra las autoridades israelíes, a quienes responsabilizan de haber actuado de manera “ilegal” contra los manifestantes palestinos. En un editorial, el líder de  Bet’selem habla de la situación vigente como la “vergüenza” de Israel.

El 30 de marzo pasado, la manifestación por la “Marcha del retorno” –una serie de protestas y acampes con tiendas, a lo largo de la frontera entre Israel y la Franja de Gaza, que se prolongarán hasta el próximo 15 de mayo- se transformó en la tragedia más sangrienta desde la guerra de 2014. Las fuerzas armadas israelíes, que habían preanunciado que habría duras reacciones, abrieron fuego, y a través del uso de drones, lanzaron gases lacrimógenos sobre los manifestantes, hiriendo a cuando menos 750 personas y matando a 16, entre ellas, a un joven de 16 años. Otra persona más murió ayer debido a complicaciones por las heridas recibidas. Palestinos y activistas acusan al ejército israelí de disparar contra personas que estaban alejadas del vallado e incluso contra aquellos que huían. Por su parte, Israel afirma que los manifestantes eran militantes de Hamas que se habían acercado al cerco de seguridad con intenciones violentas, a la vez que rechaza el pedido de la ONU y de la Unión Europea, que solicitan abrir una investigación independiente sobre los hechos y reitera su intención de abrir fuego contra todo aquél que amenace la frontera.

“Si la manifestación en Gaza hubiera sido pacífica –continúa Ofran, en su diálogo con AsiaNews- las personas, especialmente en Israel, podrían haber escuchado su grito y pensar que Israel es responsable de la situación que se vive en Gaza. Por eso, el gobierno ha comenzado a ‘prepararnos’ de antemano para la ‘violenta amenaza’ de la protesta. El IDF [ejército israelí, ndr] ha ejecutado la orden… de esta manera, las autoridades se han cerciorado de que los palestinos se mantuvieran violentos y sean considerados una amenaza para Israel, de modo que a nadie en [todo] Israel se le ocurra pensar que somos los culpables de la crisis humanitaria que se viven en Gaza”.

Al ser contactada por AsiaNews, otra ONG, Physicians for Human Right -Israel se sumó al coro de las críticas, afirmando que “Israel se ha equivocado al tratar la manifestación cerca de la frontera de Gaza como una “operación militar”,  y sosteniendo que “no hay manera de que el gobierno pueda justificar que una protesta legítima” se haya concluido con muertos y heridos. “Bloquear Gaza durante más de diez años, dejando que ésta se precipite en una crisis humanitaria, y luego negar a la población el derecho a protestar es inadmisible. Gaza necesita soluciones, y no que se ejerza más violencia contra ella, e Israel nuevamente ha fracasado a la hora de brindar cualquier tipo de solución”.

También ha sido dura la acusación de la ONG B’Tselem, que inmediatamente calificó de “ilegal” la orden disparar sobre los palestinos. Hagai El-Ad, director ejecutivo de la organización, ayer publicó un editorial en el periódico israelí Ynews, acusando a los miembros del gobierno israelí de cometer crímenes de guerra, de los cuales además evade su responsabilidad. “El vocero del IDF se ha superado a sí mismo cuando hizo alarde en un tuit (que luego fue eliminado) de que ‘Nada ocurrió sin control; todo fue preciso y medido, y no sabemos de dónde cayeron todas esas balas’. Parece que nuestros proyectiles inteligentes –que han herido a cientos de palestinos- fuesen capaces de determinar con precisión quirúrgica quiénes representaban un peligro mortal, y parece que no hubiese otra posibilidad de accionar. Hay gente que incluso recibió disparos estando a una gran distancia del lugar. Hay quienes recibieron disparos por la espalda. O hay quienes recibieron disparos cuando estaban alejándose de los soldados”. Y concluye: “Por suerte [a los palestinos] podemos echarles la culpa de todo –ellos, que se matan solos, que se matan a sí mismos. A fin de cuentas, en caso de que todo esto fuese culpa nuestra –y el cielo nos libre de ello-, ¿que podríamos hacer con nuestra vergüenza?”.

En este momento, la situación en la frontera de la Franja está calma. Unos miles de palestinos permanecen acampando en tiendas, mientras algunos cientos han continuado manifestándose en los dos días que siguieron a la protesta, aunque ubicándose a una mayor distancia del confín.