El terrorista se hizo estallar fuera del mausoleo del “santo” sufí Pir Rakhel Shah. También hay 24 heridos. Entre las víctimas, la guardia de seguridad que impidió al kamikaze entrar al templo repleto de fieles.
Quetta (AsiaNews/Agencias)- Al menos 20 personas murieron y otras 24 resultaron heridas ayer por la noche ha devastado el ingreso del mausoleo sufí Pir Rakhel Shah, en el distrito de Jhal Magsi, provincia paquistaní de Balichistán. Mohamed Iqbal, funcionario de policía del distrito, refiere que el terrorista, armado de un cinturón de explosivos se hizo estallar cuando un guardia intento impedir el ingreso al santuario. El atentado fue reivindicado por el Estado islámico en Amaq, el sitio de propaganda de los militantes del califato, que exultó por “la operación de martirio”.
Ayer el mausoleo estaba repleto por centenares de fieles, reunidos para conmemorar el aniversario de su “santo” sufí. Según los testimonios recogidos por la policía, el terrorista espero la finalización de la oración y atacó mientras se realizaba el “dhamaal”, un ritual musical y danzas típico de la tradición sufí.
Sarfaraz Bugti, ministro del Interior de Baluchistán, declaró que sólo la rápida intervención del guardia de seguridad, que está entre las víctimas de la explosión, evitó un balance mayor. “Si el terrorista-dijo- hubiese logrado entrar en el dargah (mausoleo) habría sido una masacre”.
El de ayer es el segundo ataque a un lugar de culto sufí en este año 2017. En precedencia en febrero, un ataque al santuario sufí de Lal Shanhbaz Qalandar, en la ciudad de Sehwan, provocó más de 80 muertos y 250 heridos. El sufismo es una corriente del islam moderado y prevé prácticas místicas y liberadoras (como la música y la danza). Tales prácticas son atacadas por los extremistas, que las consideran heréticas y como un insulto al islam.