Nuevas fotos del Asia Maritime Transparency Initiative muestran que Beijing ha instalado armas y sistemas de defensa misilística en algunas de las islas artificiales que ha construido en las zonas disputadas: “No sabíamos que poseían sistemas tan grandes y tan avanzados”.
Beijing (AsiaNews) – China ha instalado armas y sistemas de defensa misilística en cada una de las islas artificiales que ha construido en el Mar de China meridional en los últimos meses. Es lo que surge de las nuevas imágenes satelitales capturadas por Asia Maritime Transparency Initiative (AMTI), vinculada al Centro de estudios estratégicos e internacionales estadounidense. A partir de junio, el grupo ha estado monitoreando el avance de la obra que Beijing lleva adelante en las barreras de coral de Fiery Cross, Mischief y Subi, localizadas en el archipiélago Spratly.
En estas islas, China ha incrementado el equipamiento militar que ya hubo de emplazar en otros territorios del Mar de China meridional. La AMTI declara que las imágenes muestran “lo que parecieran ser cañones anti-aéreos y sistemas de artillería anti-misil (CIWS), capaces de repeler ataques efectuados con misiles de crucero”. Además, las imágenes de Fiery Cross revelan la existencia de torres conteniendo sistemas de radar.
Según los expertos de la AMTI, “estas armas demuestran que Beijing considera seriamente la defensa de sus islas artificiales en caso de darse un conflicto armado en el Mar de China meridional”. Greg Poling, director del observatorio, afirma que tras pasar meses analizando las imágenes “esta es la primera vez que estamos seguros al decir que [estas instalaciones] son posiciones para una defensa anti-aérea y CIWS. No sabíamos que poseían sistemas tan grandes y tan avanzados”. Beijing, agrega Poling, “continúa diciendo que no está militarizando el área, pero el día de mañana podría posicionar cazas de guerra y misiles tierra-aire, si así lo quisiera”.
Las instalaciones chinas servirían para componer un paraguas defensivo dotado de una plataforma móvil de misiles tierra-aire, similar a uno que ya fuera construido en las islas Paracelso.
La región del Mar de China meridional está siendo disputada desde hace años por Taiwán, Filipinas, Brunéi, Malasia y China. Luego del arbitraje promovido por las Filipinas, en julio pasado una sentencia del Tribunal de La Haya juzgó que las reivindicaciones chinas en el área “carecen de todo derecho”. A pesar de ello, Beijing continúa con su política agresiva en las aguas disputadas, construyendo bases navales y aéreas en más atolones.
Hace algunos días, las imágenes capturadas por la empresa estadounidense Planet Lab revelaron que Vietnam también está llevando adelante obras de drenaje y construcción en algunas islas disputadas, tratando de ocupar la mayor cantidad de “posiciones” posibles, para defenderse de China.