Obispo de Macao: la clausura del Año Santo no es como un fuego artificial que se desvanece
de Lucia Leung

Mons. Stephen Lee recordó que después del camino "especial", ahora es el camino "ordinario", para alcanzar misericordia y donarla. Una misa con cerca de 3 mil personas. La actividad florecida durante el Año Santo.


Macao (AsiaNews) – La clausura de la Puerta Santa en este año especial de la Misericordia no significa que "la misericordia de Dios ha terminado". Según la experiencia de este año no es como "un espectáculo", como "fuegos artificiales" que se desvanece, en algo "emocionante", pero luego no te deja nada. Con la conclusión del Año Santo ha terminado una ruta "especial", pero sigue existiendo la forma "normal" por piedad: la confesión, el ayuno, la penitencia por los pecados, la liturgia, la compasión por los demás. Ellos son algunos de los temas tocados por Mons. Stephen Lee Bun-sang, el obispo de Macao, el cierre de la Puerta Santa. El prelado, originario de Hong Kong, asumió como obispos de la diocesis de la ex colonia portuguesa el pasado 23 de junio.

En la ceremonia participaron al menos 3 mil personas que se reunieron fuera de la St. Paul’s School.

Antes de la conclusión de la ceremonia, el jefe del Comité para el Año Santo, el vicario general p. Pedro Chong ha puesto de manifiesto un informe sobre las actividades florecidas durante el jubileo: conciertos musicales; peregrinaje en Portugal y Francia; adoración eucarística durante 24 horas; sacramento de la reconciliación para los jóvenes.