El actual presidente, el primer ministro y el ex presidente enviaron un mensaje de felicitación. Los nacionalistas budistas cingaleses afirman que debe derrotar el terrorismo. Presidente Sirisena: "Conmigo a cargo, las relaciones con los Estados Unidos se han intensificado".
Colombo (AsiaNews) - La victoria de Donald Trump a la presidencia de los Estatos Unidos de America es "histórica". Lo afirman los tres principales líderes políticos de Sri Lanka, quienes enviaron cálidos mensajes de felicitación. El actual presidente Maithripala Sirisena, el primer ministro Ranil Wickremesinghe y el ex presidente Mahinda Rajapaksa afirman que los lazos entre los dos países se fortalecerán aún más. Al mismo tiempo, el grupo nacionalista Bodu Bala Sena (BBS, budistas cingaleses de derecha) espera que Trump sea un jefe de Estado fuerte y derrote al terrorismo islámico.
En el mensaje de Sirisena, se lee que "los EE.UU. es el hogar adoptivo para muchos habitantes de Sri Lanka y actúan como agentes importantes para forjar lazos más estrechos entre los pueblos. Esto contribuye en gran medida a las relaciones bilaterales entre nuestros dos países".
De acuerdo con el actual presidente, desde que fue elegido para guiar a Sri Lanka en enero de 2015, "las relaciones entre nuestros dos países se han fortalecido". "Estoy seguro - añade - que su elección ayudará a construir la relación y ampliar aún más nuestra cooperación".
El primer ministro Wickremesinghe escribió: "A pesar de la distancia geográfica, las relaciones bilaterales entre Sri Lanka y Estados Unidos se extienden a lo largo de 70 años de relaciones diplomáticas formales, y más de 200 años de estrechas relaciones personales. Hoy nuestra asociación es más fuerte y más robusta que antes".
Wickremesinghe subrayó la importancia de la elección del electorado estadounidense, que "prefiere un hombre de negocios a un político. Esto significa que ellos quieren un cambio".
El ex presidente Rajapaksa cree que la elección de Trump es el "testimonio del hecho que el amor por el propio país supera todo". "Con él como presidente, no vemos la hora - concluyó - que venga la instauración de un nuevo orden mundial basado en los principios de la igualdad soberana entre las naciones y la no interferencia en los asuntos internos de los Estados-nación".