Islamabad (AsiaNews)- Al menos 257 muertos y 461 heridos; 1.413 casas destruidas en modo parcial y otras tiradas al suelo; 1.337 pueblos dañados, con un total de 551.159 personas involucradas. Es el último informe sobre los daños causados por los aluviones que el 5 de septiembre pasado se abatió sobre Paquistán, especialmente en la provincia del Punjab. Para el gobierno los ciudadanos golpeados por la calamidad superan el millón de personas.
Para hacer frente a la situación, la Iglesia católica invitó a una jornada de oración para mañana, para apoyar a los sobrevivientes. Mons. Rufin Anthony, obispo de Islamabad/Rawalpindi, visitó la Sharoon Colony (cristiana) y se encontró con sus habitantes. Aquí, más de 200 casas fueron destruidas y centenares de personas están aún esperando algún tipo de ayuda.
Asghar Masih, uno de los residentes, cuenta cómo su casa fue arrasada por el río desbordado: "cuando hemos visto subir el nivel del agua, con mi familia subimos al techo. Improvisamente la casa comenzó a deslizarse por un lado: escapamos e impotentes la hemos visto desaparecer en el río".
Según la National Disaster Management Authority (Ndma), unos 435.843 acres de terreno agrícola fueron arruinados por las lluvias. En Azad Kashmir 3.986 casas fueron destruidas en modo parcial y 2.132 en modo total.
El Punjab Highway department anunció que 20 rutas están cerradas al tránsito. En la central ciudad de Jhang, las autoridades han deliberadamente han roto un terraplén para desviar la inundación. Mary Bibi, del pueblo de Head Marala, cerca de Silkot, explica. "Los aluviones han destruido todo. Las barcas vinieron a buscarnos, pero no tenemos comida, ni nada. Vivimos a cielo abierto y nos dijeron que probablemente llegarán más lluvias.