Beijing (AsiaNews/Agencias)- Abandonado si comida por una semana y con los pies encadenados: este es el trato reservado a Ilham Tothi, profesor de economía y de etnia iughura, famosos activista por los derechos de las minorías que viven en China. El académico está encarcelado desde enero pasado. Quien reveló las condiciones del disidente fue su abogado Li Fangping, que sólo esta semana pudo encontrar por primera vez a su asistido después del arresto.
El ayuno obligado fue después del atentado a la estación ferroviaria de Kunming, en marzo pasado, en el cula murieron 29 personas. Para las autoridades chinas los separatistas iughuros de Xinjiang serían los responsables del ataque.
Tothi, 54 años, es famoso por sus intervenciones públicas en favor de la problemática iughura. Esta etnia vive en la región autónoma septentrional de Xinjiang, es de lengua turca y de fe musulmana, y soporta una gran presión sobre la lengua, la cultura y religiosa de parte del gobierno central chino.
Sin embargo no existen pruebas de que Tothi apoye al movimiento separatista y desde el día de su arresto el académico continúa proclamándose inocente. "Él cree que siempre buscó trabajar en el interés de la nación con palabras y hechos- explica su abogado-, y por la integración orgánica de la mayoría Han y de la minoría iughura".
Li ha dicho que en enero pasado Tothi habría hecho una huelga de hambre, porque las autoridades carcelarias le daban comida no según la tradición islámica. Las autoridades lo obligaron a beber leche cuando sus órganos empezaron a sangrar.