Mongolia, catequistas reflexionan sobre Dios "Padre y Creador"
Después de los días de descanso de verano comienzan otra vez para jóvenes católicos que, después de un período de formación en Ulan Bator, viajarán por todo el país para preparar a los catecúmenos de todas las edades. El enfoque de este mes es la naturaleza de Dios y la redención del pecado original.

Ulan Bator (Asianews) - Entender que Dios es "padre y creador," comprender lo que los católicos creen y quieren proclamar al mundo y lo que es el pecado original. Estos son los temas de la última reunión para catequistas mongoles que tuvo lugar a principios de octubre en Ulan Bator, la capital de Mongolia. Las reuniones son mensuales y se utilizan para formar laicos de la pequeña comunidad de mongoles católicos que luego irán a las diversas parroquias para educar a los catecúmenos de todas las edades.

La lección de octubre fue abierta como de costumbre por Mons. Wenceslao Padilla, administrador apostólico de la joven Iglesia mongol y fue dirigida por la hermana Clara Lee SPC. La monja señaló que "desde el pecado original cometido por Adán y Eva, Dios ha enviado los patriarcas al mundo, los profetas y al final incluso su hijo para redimir a la humanidad." "esto - añadió - es la buena noticia que proclamamos al mundo".

Según las últimas estimaciones, los cristianos de todas las denominaciones representan poco más del 2 por ciento de la población mongola, que es en gran medida budistas con creencias chamánicas. Tiene también un elevado número de personas no religiosas, casi el 40 por ciento del total. Pocos mongoles son católicos (835 en 2012) pero el número de bautizados ha subido ahora a 900. Al mismo tiempo, los católicos han establecido servicios para huérfanos, pobres y ancianos, clínicas médicas en un país con una pobre infraestructura de salud, así como diversas escuelas técnicas y educativas.

En 1992, cuando llegaron los primeros misioneros extranjeros (especialmente los filipinos), incluyendo el futuro Monseñor Wenceslao Padilla de la Congregación del Inmaculado Corazón de María, no había ninguna parroquia. Hace unos meses había cuatro en la capital; hoy hay seis, una señal de crecimiento. En su carta pastoral por los  20 años de la Iglesia en Mongolia, el Prefecto Apostólico señaló que en la actualidad, hay 81 misioneros procedentes de 22 países diferentes. También escribió que los dos primeros seminaristas nativos de Mongolia reciben formación para el sacerdocio en Daejeon, Corea del Sur.